1740: Nace el 13 de diciembre en Jerez de la Frontera en el seno de una familia acomodada, es la menor de cinco hermanos. Su madre la rechaza al nacer, por lo que su abuela y su tía la reciben en su casa, la educan con mucho amor y en sólidos valores cristianos, hasta los 7 años.\r\n
1747: Sus padres exigen que regrese a la casa familiar para que realice trabajos domésticos y se convierta en su sirvienta. La pequeña acude con mucha alegría a pesar del papel que va a desempeñar.
1749: Sufre una gravísima enfermedad que estuvo a punto de quitarle la vida, su abuela la encomienda a Santo Domingo y recupera la salud milagrosamente.
1750: Sus padres arrepentidos, reconocen su injusto proceder y le dan el lugar de hija que le corresponde, la quieren y atienden todas sus necesidades. Ella les da su perdón y jamás les guarda rencor.
Bailaora flamenca
1756: En su adolescencia se destaca notablemente como «bailaora» y sufre una crisis sobre lo que haría con su futuro.
Por un lado se le presentaba una vida de fama y reconocimiento, y por otro estaba la promesa que su abuela hizo a Santo Domingo de que si curaba a la niña, ésta se convertiría en monja dominica.
Decide entregar toda su vida a Dios y olvidarse de la superficialidad de la vida y entra en la dirección espiritual del P. Alonso de Cala, párroco de la Colegial.
Escenas de la vida de Santo Domingo de Guzmán
1757: Comienzan sus primeras experiencias místicas: manifestaciones divinas y luchas contra el demonio.
1761: Ingresa a la Orden Tercera de Santo Domingo y afianza su devoción al Santo Rosario.
1770: Fallece su madre. Queda a cargo del cuidado y atención de la casa familiar y de su padre junto a su hermana Manuela.
1771: Rechaza el matrimonio y hace voto privado de castidad, pone como testigos a la Santísima Virgen María, a San Francisco y a Santo Domingo.
1777: Padece una infección respiratoria muy grave que la mantiene en cama varios meses.
Su deseo de entregar su vida como hija de Santo Domingo es más intenso y dedica su tiempo de convalecencia a la oración y la penitencia.
1779: Fallece su padre. Su hermano Tomás sacerdote, pasa a ser el responsable de la casa y de sus hermanas, pues sus hermanos Blas y Francisco tenían sus vidas independientes.
1780: El P. Cala intenta que ingrese al convento de clausura de las clarisas, pero ella se niega.
El 8 de diciembre hace voto de castidad perpetua.
1781: 6 de enero queda muda e inicia un largo periodo de ayuno de pan, agua y Eucaristía. Experimenta grandes consuelos espirituales y al mismo tiempo duros ataques demoníacos, que combate eficazmente con el rezo del Santo Rosario.
1783: 1 de enero recobra el habla. el P. Cala fallece y su dirección espiritual pasa al dominico Andrés Ruíz. Profesa los votos de obediencia, pobreza y castidad en la Orden Tercera de Santo Domingo.
Comienza su vida de apostolado y ayuda a los pobres y enfermos.
Asentamientos tras las murallas de las ciudades europeas (finales del siglo XVIII)
Retratos originales de María Antonia de Jesús y del Beato Diego José de Cádiz
1784: Comienza a manifestarse en quienes ayuda curaciones milagrosas, y se extiende su fama de taumaturga.
1787: el 4 de agosto obtiene el permiso oficial para vestir el hábito de terciaria dominica y tiene la inspiración de fundar un Beaterio.
1788: el 26 de septiembre fallece su hermano Francisco, también sacerdote.
Junto a su hermana recogen a un niño húerfano para criarlo.
1789: Fallece su tía Sebastiana, quien la atendió junto a su abuela en su primera infancia.
1790: Hace voto de clausura en la llaga del Costado de Cristo.
1792: Conoce al misionero capuchino Diego José de Cádiz y entablan una hermosa amistad. Gracias a las extraordinarias penitencias de María Antonia, las misiones tiene un gran fruto.
1795: Fallece su hermana Manuela, quedándose completamente a cargo del pequeño Manuel María.
1797: Fallece el P. Andrés Ruiz, y su dirección espiritual pasa al P. Francisco González dominico, íntimo amigo del Beato Diego. Ambos le piden que comience a escribir su biografía y todas las experiencias interiores que le acontecen.
1798: Trabaja incesantemente por las jóvenes pobres explotadas sexualmente por mafias establecidas en la ciudad y atiende a los hijos de éstas.
Cuida enfermos, convierte a varios clérigos que vivían una doble vida.
Recibe a todo tipo de personas en su casa, las cuales buscan su consejo, su oración y su intercesión. Su amistad con la gente rica de Jerez le permite tener beneficiarios para cubrir las necesidades básicas de sus pobres.
Cariñosamente empiezan a llamarla «La Sierva de Dios».
Escribe fragmentos del evangelio en lenguas que no conoce: latín y griego.
Se le aparecen almas del purgatorio pidiéndole su intercesión.
Varios enemigos intentan matarla pero fracasan, en más de una ocasión queda mal herida.
Contesta una encuesta de un religioso trinitario sobre la situación de su alma y éste estima que se encuentra en matrimonio espiritual y perfecta unión con Cristo.
Busto de María Antonia de Jesús (patio principal de la casa Madre)
1799: 4 de octubre se le permite iniciar la vida común con otras terciarias. El P. José Díaz Visitador de la Orden de Predicadores en España, agrega a María Antonia y a sus posibles compañeras a la comunión e indulgencias propias de la Orden.
1800: 6 enero comienza formalmente la vida de comunidad, hay dos novicias y se reciben dos candidatas más, también se produce la primera salida.
El 12 de octubre, en la epidemia de fiebre amarilla, fallece su hermano Tomás, dejándole la casa y los bienes como sustento del Beaterio del Santísimo Sacramento.
1801: Algunos eclesiásticos quieren que la nueva comunidad desista e ingrese a las Nazarenas, pero María Antonia con el apoyo del Beato Diego y del P. González se opone tenazmente.
El 24 de marzo muere su gran amigo y mentor el Beato Diego de Cádiz.
1802: El P. Francisco González da normas concretas sobre la vida comunitaria.
El 2 de abril presenta al Ayuntamiento la solicitud para obtener la licencia oficial para el Beaterio. El 29 de julio la solicitud es elevada al Arzobispado de Sevilla y al Rey para su aprobación.
El canónigo regular D. Agustín Moreno se convierte en bienhechor del nuevo instituto religioso.
1805: María Antonia ofrece su casa para que se realicen ejercicios espirituales para señoras, también es un lugar de atención a pobres y enfermos, y pasa a verse como una casa donde se puede encontrar a Dios.
Parte de la fachada de la casa de María Antonia de Jesús, actual Beaterio y Casa Madre de las Dominicas del Santísimo Sacramento
1806: El continuo contacto de María Antonia con las jóvenes explotadas, le hace consciente de la necesidad de proporcionarles una educación reglada, por lo que, habla con el P. González, su director espiritual, sobre su intención de solicitar para el Beaterio una licencia escolar.
El Vicario General de Sevilla aprueba la celebración de misas en el oratorio del Beaterio.
1807: 27 de enero se recibe la autorización Papal para tener Oratorio privado y tabernáculo.
Se compra un solar junto al Beaterio para establecer las clases del nuevo colegio.
El 18 de febrero el Ayuntamiento aprueba el proyecto escolar solicitado por «La Sierva de Dios».
1808: Junto a sus hermanas religiosas empiezan a preparar todo lo concerniente al colegio, reciben ayuda de todo el pueblo.
Fachada del actual colegio «Nuestra Señora del Rosario» Jerez de la Frontera
1809: El 29 de octubre su frágil salud le hace caer definitivamente en cama.
Pasa a tener un nuevo confesor el P. Francisco Haro del Rosario, Franciscano Descalzo, quien tras la muerte de María Antonia se encarga de recopilar todos sus escritos en tres tomos que guarda celosamente para evitar que la invasión francesa los destruya.
1810: 3 de febrero, entrada de los franceses.
Ante la insistencia de su comunidad se refugian en el convento del Espíritu Santo, aunque ella anuncia que el Beaterio no será saqueado.
En marzo regresan al Beaterio, el día 23 recibe solemnemente el Viático.
El 18 de abril, Miércoles Santo, comulga por última vez.
El 19 de abril, Jueves Santo, a las 9:30 después de los Santos Oficios fallece.
El 20 de abril Viernes Santo, su cadáver queda expuesto en el coro del Beaterio y es visitado por una gran multitud de personas.
El Sábado Santo, su féretro acompañado por todo el pueblo de Jerez es enterrado en la capilla de San José de la Iglesia Colegial, actual Catedral de la diócesis de Asidonia Jerez.
Catedral de San Salvador de la diócesis de Asidonia Jerez
